El Pazo de Raíndo también llamado Pazo-Torre de Porras de Raíndo, data del siglo XVIII y fue en sus orígenes de propiedad monacal. Allí vivían monjes y daban cobijo a indigente y peregrinos haciendo uso del derecho de asilo.
Se trata de los restos caídos de un antiguo cruceiro que fueron recogidos por Xesús Varela Pena y colocados en su actual lugar, una ventana cerrada con un enrejado.