El cruceiro está sobre una plataforma cuadrada de dos peldaños que tiene acceso por los cuatro lados, bien hechos y reparados con cemento por las roturas.  El pedestal, cúbico y de un solo bloque, tiene las aristas superiores matadas. En la cara del frente podemos ver una calavera con dos tibias cruzadas, toscamente trabajadas. En la cara posterior, podemos ver la fecha de realización año 1670. La columna es octogonal desde la base, con algunos desperfectos en la superficie. En la parte que mira a la iglesia presenta un santo trabajado en el mismo bloque, que descansa en una pequeña peana prismática, aunque con restos de pintura granate en varias partes.  El capitel empieza con un anillo circular. En cada una de las esquinas vemos una voluta muy trabajada, y en las caras una cabecita de ángel. El ábaco, de lados ligeramente curvos y con esquinas en chaflán. La cruz es de sección rectangular, con aristas ligeramente matadas, brazos largos y testero pequeño, terminado en una cartela con las letras de INRI. La imagen del Cristo, de un gran realismo, está totalmente pegada a la cruz.  La Piedad, dibujada por Castelao en su libro "As cruces de pedra na Galiza", está sentada con Cristo en el regazo